La Navidad tradicional en el Quindío, se celebra en una finca.

Imagina una Navidad donde las luces destellan entre las montañas, donde el aroma a café se mezcla con el aire fresco y cálido de diciembre. Este escenario encantador es una realidad en la región cafetera de Colombia, donde las tradiciones se viven con pasión y las reuniones familiares toman un tono especial en lugares como la Finca Turística Miraflores, en el corazón de Quimbaya, Quindío.
En Miraflores, no se trata solo de hospedarse; es sumergirse en un ambiente que abraza la esencia misma de la temporada navideña. Imagina despertar en cómodas habitaciones que más que simples alojamientos, son acogedores refugios con vistas que despiertan la tranquilidad. La finca, con capacidad para 24 personas, se convierte en el escenario perfecto para reunir a familiares y amigos, creando momentos que perduran en la memoria.
La atmósfera navideña se fusiona con las instalaciones de Miraflores: piscinas y jacuzzis invitan a refrescarse bajo el sol de diciembre, mientras que las áreas verdes se prestan para caminatas que conectan con la naturaleza. La cancha de fútbol se convierte en un campo de risas y competencias amistosas, y la mesa de billar es el punto de encuentro para momentos divertidos en familia.
Pero la experiencia se expande más allá de los límites de la finca. A pocos minutos, el Parque del Café se erige como un escenario mágico con montañas rusas, teleféricos y un espectáculo de caballos que deleita a grandes y pequeños. Y no puedes perder la oportunidad de explorar pueblitos mágicos del Quindío, como Quimbaya con su fiesta de luces, Circasia, Montenegro, Filandia o el muy conocido Salento, un pueblo que se viste de luces y tradiciones navideñas, ofreciendo una ventana a la auténtica cultura cafetera.
En el Valle de Cócora, las palmas de cera, las más altas del mundo, dan la bienvenida a quienes buscan la maravilla de la naturaleza. Así, la región de Quindío se convierte en un lienzo lleno de aventuras y descubrimientos.
La Finca Turística Miraflores no es solo un lugar para quedarse; es una invitación a vivir la magia de la temporada en la región cafetera de Colombia. Con sus cómodas habitaciones, actividades al aire libre y una ubicación estratégica, la finca se convierte en el punto de encuentro perfecto para celebrar la Navidad y el Año Nuevo en un entorno que captura el corazón de Colombia. Ven y descubre una Navidad diferente, llena de experiencias auténticas y momentos que perduran.